Monday, December 22, 2008

Soy como los gatos, caigo de pie. Dormí abrazando a un carboncito que da besos en el cuello, con caricias en la espalda de pepé le peu y con abrazos de estás aquí.
A le Peu, le gusta la piel, a mí, me gustan los abrazos. Yo lo abrazo, y pienso que soy como los gatos, él me besa el cuello y me da risa, me voy alejando, porque hiere mi piel de mucha risa, hiere tanta piel que resucita felina y deja de pensar. Y cuando me muerden con unos labios tan sensibles, caigo de pie, porque nada me daña, porque soy como los gatos que caen de pie y huyen para dejar de pensar con la entrepierna y la sensación. Porque pienso que soy como los gatos que no piensa en que piensan en las caricias de alguna tibia mano. Y me pongo la cadena y la esclavitud para no equivocarme y tocar el error, porque no todo es látex y pasión. Porque al final, es más exótico que dos gatos maúllen con la misma canción de la verdad, rían entre abrazos y besos y vuelvan a acurrucarse y dormir porque son del mismo clan.
Canciones como sopa de caracol, asereje, la lambada, bailes y retorcijones nos han ido uniendo. Cano conoció a Memo en el Italianis coffe, yo conocí a Memo cuando estudiaba letras e intercambiamos textos por un tiempo, la ruptura y demás situaciones nos reunieron por la coincidencia que Monterrey es muy pequeño. Tres años de no ver al hermano pitufo, tres años que pasaron como si hubiera sido ayer, entre vodka, tequila, cerveza, lícor. Una noche bohemia y teatral, una noche de amigos que no se habían visto en años y amigos que no se habían visto nunca: el génesis del haberse conocido así: Memo-escritor conoce a Amaya-escultor, quien conoce a Élida-actriz-escritora, quien conoció a Cano-escritor, quien me conoce a mí, y que me presentaron a Vla-progamador, quien congenió con programador Óscar, quien conoce a Edy-diseñador, fotográfo,multiskills, quien me conoce. Y todos somos una buena bola de alcohol que se la pasa feliz.