Friday, September 30, 2011

1. Nunca me he casado, y no sé si lo haré algú´n día.
2 Me llevo chido con todos mis ex novios, menos con el que alguna vez quise más.
3. El amor de una pareja,  ya no es prioridad. Pero estaría chido si lo encuentro.
4. Quiero viajar.
Me iré a viajar por msn

(Borrador)
Isadora Montelongo





He dicho a un amigo, que no tengo vida. Escribo y veo porno en la computadora portátil casi todos los días.

─Tal vez, te haga falta viajar, ─dice, colocando un emoticón sonriente y prediseñado por msn─.

Tardo en contestar y vuelve a apuntar que su maestro de ciencias le decía que el porno no es tan malo, que acelera la sangre y da buena circulación.

Tal vez, pienso.

─Sí, tienes razón, ─escribo después de algunos minutos sobre la ventana del msn─ y le comienzo a contar que me iré de viaje por Corea, con todo el porno que he visto, mi corazón es como un motor de jet, capaz de volar al otro lado del mundo en un instante. Le digo que ya tengo la agenda de viaje. Primero Europa, España, Italia, Varsovia, Grecia, Egipto y Corea. Le prometo que como jet, pintaré el cielo de azul clarito hasta llegar a un hotel. En la cama de cada hotel, recostaré las ganas hasta que se intrinquen con el profundo sueño. El amor será un desconocido y yo seré el recuerdo más recurrente de alguna chaqueta. Y es que la vida debe tener algo mejor para mí que una posición sexual dura grabada por directores con el presupuesto corrido.

Mi amigo no escribe nada y yo sigo en la agenda de viaje.

España, Italia, Varsovia, Grecia, Egipto y Corea me han dicho que sí, como una mujer de video abre las piernas.

En España querré regresarme, seguro, miraré porno sin salir del hotel los primeros días, pero luego con la cuenta de internet a euro por 15 minutos, tendré que obligarme a caminar por las calles principales del país. En Italia, la comida, me acercará al verdadero sexo que no sólo empieza con la boca llena de salsa de tomate o con la mano desabrochando el pantalón frente a la computadora, sino con el corazón haciendo bizcos.

Varsovia, Grecia y Egipto, me harán lo mismo que a sus pueblos, obligarme a enterrar las viejas rutinas y el baile de los dedos.

Y al fin llegaré a Corea, casi, casi renaciendo, con la computadora portátil perdida en alguna de las vueltas que he dado, pero con la sonrisa tan larga como no había pasado desde hace tiempo en que sólo escribo y veo porno.

Mi amigo responde en el msn después de haberse tardado tanto.

─ No mames, dijiste porno y me masturbé con redtube. Tenía rato de no ver porno. Debo irme, entro al trabajo.

Digo adiós sobre la ventana, con una cara prediseñada por msn y vuelo inmediatamente a clickear sobre el enlace ardiente que me ha pasado mi amigo. Tal vez, luego viaje, otra vez por msn con la sangre acelerada como el motor de un jet. Y quién sabe, tal vez, hasta tenga una vida.