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Fiesta. Mar. Arena. Y noche. E me habló tanto de Sayulita, de cómo es esa ola en donde casi muere. Yo lo escucho, yo similar, cuando abro la boca digo naturaleza. E es tan cariñoso como la capa delgada de la ola que llega a los pies, E dice tanto la verdad que me dijo: “¡ya deja de hablar de tus ex… como si no tuvieras nada qué contar! Por la mañana con el pijama naranja de Calder, que me gustó tanto, platicamos de eso que me dijo E. llegando a la verdad… después de tanto tiempo. Flow.
Todo fue realidad. Todo fue amanecer en la noche, abrir los ojos de gato, sentir la tubería rota del Clandestino en los pies, bailando regue, abrazando amigos, saludando ex novios vikingos, tomando shots de tequila, brindando por esa vida que me llena, tocando tatuajes que te marcan no sólo la piel, sino el amor, planeando viajes y puestas de mar.
Gracias Amigos, Jenny, Calder, Edy, los quiero mucho.
Gracias por esa noche tan cálida de abrazos y besos
Edy, Te quiero tanto, baby… Feliz cumple y que siga la pachanga en Sayulita