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Me encanta platicar con fuego, E. me comenta todo y yo escucho, tan atenta que mis ojos brillan en la noche, como un gato esperando maullar. C. no deja de escribir por teléfono, C. se queda dormido con frío hasta que llego a su cama. C. esperó tarde muy tarde. Y yo sigo encantada con E. escuchando de su vida, de sus experiencias y su amor. E. me tiene encantada. E, es fuego como yo. E. quema y se repite en mí. E, como si fuera una extensión que sale de mí. E. E. E. E. E. E. FU . E. GO.