¿Quién no quiere dormir más tiempo? Neta, yo por mí me quedaba con Morfeo toda la tarde, abrazándolo con mis almohadas y acariciándole la piel con mis descalzos pies. Y es que el tipo es todo un sueño, uno de esos sujetos que te comes entero y hasta babeas. Y de sueños que babeas, el sábado tuve uno, a mitad de clase me quedé súper jetona y es que un día antes me la pasé viendo cómo hacían pays, algo de un trasero muy interesante que en el menor descuido le hago un altar y tratando de coordinar la similitud entre que algunos hombres compran kooley como mal compran condones de todos los tonos y sabores. Una noche con venus muy parpadiante, una mirada a un aura maltrecha y ahogada y alrededor de 18 chillidos de ya me quiero ir a dormir. Y es que Morfeo es Morfeo. Un Morfeo no muy feo. Y pues que vivan los dormilones.
No comments:
Post a Comment